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Las perlas son el producto de una reacción de enquistamiento de una partícula extraña dentro del cuerpo blando de los moluscos, especialmente en los bivalvos. Las perlas más conocidas son las consideradas como gemas o piedras preciosas, por su simetría y su particular lustre.
Las perlas naturales se forman cuando un cuerpo extraño penetra al interior del cuerpo del molusco, el cual reacciona cubriendo lentamente la partícula con una mezcla de cristales de carbonato de calcio (CaCO3) y una proteína llamada conchiolina, formando la sustancia conocida como nácar, que es la sustancia que forra la cavidad paleal del animal (las paredes interiores de las valvas). Al cabo de un período variable la partícula termina cubierta por una o más capas de nácar, formando una perla, y tardan aproximadamente 10 años en crearse.
Las perlas son de tamaño, color y forma variables. El valor de la perla se determina en función de criterios varios pero puede decirse que se centran en tres: una forma deseable (por ejemplo, las esferas perfectas o las «lágrimas»), la rareza de su color (casi toda la gama entre el blanco y el negro) y naturalmente la talla. Aunque las características estéticas y de tamaño son fundamentales en la valoración de una perla, el precio final depende en gran medida de las tendencias de la moda del momento.
El brillo de la perla proviene de la reflexión luminosa en la superficie cristalina, mientras que la iridiscencia proviene de la refracción y difracción luminosas en las múltiples capas de nácar translúcido que forman una perla cualquiera.
Las perlas han sido apreciadas por bastantes pueblos desde la antigüedad debido a su rareza, belleza y extraordinario valor.
Tipos de Perlas:
Del Mar del Sur o Australiana: Se trata de un tipo de perla cultivada en las aguas saladas del norte de Australia, en Indonesia y Filipinas. Tiene una gama de color que va desde el blanco al negro. Se destacan por su iridiscencia plateada y dorada. Alcanza tamaños entre los 9 y los 28 mm. Su forma puede ser perfectamente redonda hasta adoptar una forma asimétrica y un brillo del medio al alto. son las mejores en su especie . El precio varía dependiendo de su brillo.
El tiempo de cultivo de esta perla es de tres a 9 años.
La perla de Tahití: Son cultivadas en aguas templadas en agua salada de la Polinesia Francesa, por la Ostra Pinctada Margaritifera. Pueden ser de distintos colores: gris, verde, naranja, dorada, azul y negra.
Las perlas negras son únicas, de brillo intenso y alcanzan los 13 mm.
El tiempo de cultivo de la perla de Tahití es de dos a tres años.
Perla Akoya: Son perlas cultivadas en el agua salada de Akoya, Asia. Tienen una forma redonda y simétrica. Su tamaño varía entre 6 y 8.5 mm. Esta perla es de difícil crecimiento y tiene más brillo que las que son cultivadas en agua dulce. Su color va del crema al rosado
Perlas de agua dulce: Son cultivadas en ríos y granjas de lagos de China. Miden entre 3.5 y 7 mm. Poseen forma asimétrica y brillo que va del medio al alto. Las perlas cultivadas en este tipo de aua son en su mayoría blancas, pero pueden llegar a ser rosadas.
Perla Freshwater: Son perlas cultivadas en agua dulce, principalmente en los lagos y ríos de China, aunque su producción también se realiza -de manera más restringida- en Japón y Estados Unidos. Es orgánica, es decir que proviene de un ser vivo. Su tiempo de cultivo va de los 6 meses a los 4 años y se realiza dentro de mejillones perlíferos de la familia Unionoida.
La principal característica de estas perlas es su abundancia, ya que se llegan a producir hasta 1,800 toneladas métricas anualmente, utilizando un sistema de producción de cultivo bastante diferente al de las perlas de cultivo marinas: las perlas se producen principalmente dentro del manto de los mejillones. La mayoría no reciben un núcleo nacarado -como es el caso de las perlas de cultivo de origen marino- pero recientemente se han detectado una gran variedad de materiales para la producción de estas perlas, tales como: perlas de deshecho, núcleos de nácar, botones de nácar o núcleos de la almeja gigante Tridacna gigas,un organismo protegido de la lista de CITES.
Las formas que adoptan son variables -Redondas: son, generalmente, las de mayor valor. Es simétrica y rueda en línea recta. -Barrocas: indican forma irregular en las perlas. Son, por lo general, las menos valiosas, aunque pueden existir especímenes que lleguen a valer más que las redondas. -Semiredondas: son perlas que tienen formas redondeadas, pero que no llegan a ser enteramente esféricas. -Anilladas o estriadas: presentan líneas regulares o anillos cóncavos de manera perpendicular a un eje de revolución superior a un tercio de la superficie de la perla. -Semibarrocas: poseen un eje de simetría, por lo que las formas son ovaladas, gotas, de botón, trompo, etc.
Las perlas Freshwater son rutinariamente procesadas; el pulido, blanqueado y teñido artificial son esenciales para este tipo de perla de cultivo.[5]
Perla Mabe: Son perlas cultivadas hemisféricas. Crecen adheridas al interior de la concha de una ostra en lugar de dentro del cuerpo de ésta. Son cultivadas principalmente en Japón, Indonesia y Australia. Es una gema orgánica.
El tiempo de cultivo de estas perlas va de medio año a dos años. Son relativamente fáciles de obtener, lo que hace que su valor sea menor al de las perlas redondas.
Estas perlas son semiredondas, ya que uno de los lados de la perla es redondo, mientras que el otro es plano. Esta morfología permite que sean utilizadas en joyería y así poder ocultar el lado plano.